4 de febrero de 2014

Compartiendo secretos: cómo y de dónde surge una Producción de Moda

Ser Productor de Moda puede ser una profesión visitada desde dos ángulos: como un amable y carismático alcanzador de prendas, o como un creador de imágenes. Ambos son disfraces que uno tiene que vestir con igual elegancia. Porque como la moda lo dicta, las temporadas traen cambios, y no solo en el largo de los pantalones, sino también en nuestro devenir profesional. Nadie puede vivir en este rubro de solo hacer lo que le gusta, un nivel de prostitución es cuasi obligado: campañas de camisones, desfiles de ropa de niños, catálogos de supermercados. Pagan la obra social claro está.

Nunca deberíamos, sin embargo, dejar que la vileza del metal  no aleje de esa chispa divina que es el acto creativo.  

Para crear en la moda se puede transitar caminos divergentes; podemos copiar textualmente, amparándonos en la supuesta ignorancia de los lectores (que ya no es tal), o podemos desafiarnos a nosotros mismos, con los riesgos que esto representa. 

Los pormenores de como una nota de moda es concebida deberían ser privados, pero un poco de voyeurismo es siempre excitante, por eso la propuesta de los primeros post de este Blog van a tener ese rumbo: desnudando secretos, en que pensamos cuando armamos una nota de moda. 

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La producción con la que abrimos surgió de una idea un poco trasnochada sobre princesas guerreras en un futuro post apocalíptico, donde los supervivientes vestían los vestigios y remanentes de las culturas previas, en un mix étnico, entre la barbarie, el chamanismo y lo tribal. 

Mis inspiraciones fueron bastante plurales.

Como niño de los 80's que soy me crié mirando She-Ra, la Princesa del Poder. Por si alguno no la desconoce, les dejo el Opening a mano. Esa imagen poderosa, pero al mismo tiempo femenina, se repetiría bastante en mi mitología personal. 


 


El segundo condimento para este tutti frutti catástrofe fueron Mad Max y Water World, películas que nutrieron esa idea de desolación-cyber-punk que se puede ver en algunas tomas. Las prendas, destruidas, retaceadas y reunidas de nuevo, eran el punch de estilismo que quería transmitir con mis guerreras.  Como siempre, el cine, por más que sea pésimo, como en el caso de Water World, siempre será una fuente insigne de inspiración.









En fin, la mezcla de estos condimentos, y lo hablo como si fuese una receta de cocina ya que el proceso creativo se asemeja bastante, dio a luz una seria de imágenes potentes. Las prendas, en su mayoría vintage, fueron desgarradas, embarradas, mezcladas con pasto y otros materiales, para conseguir el efecto salvaje.

La moda no siempre tiene que ser lo que se va a usar en la próxima temporada, también puede ser un reflejo de nuestros sueños y pesadillas.

Atte. AF














Ph: Salomé Vorfas
Estilismo: Adrián Fagetti

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También les queremos contar que estamos organizando un concurso de Foto y Producción de Moda con un premio mayor: dos becas para cursar las carreras de nuestra Escuela. ¡Todo el mundo puede participar!

www.escuelaafagetti.com.ar